- “Que los concesionarios sepan que no hay ninguna indemnización, no tenemos porqué indemnizar a esos concesionarios, esto es del pueblo boliviano y se queda para el pueblo boliviano”, dijo el presidente Evo Morales, tras firmar la ley de Reinversión de Derechos Mineros que expropia 1717 minas en todo el país.
Se trata básicamente de concesiones a mineras privadas consideradas “improductivas”, pero no porque estén abandonadas, sino porque no realizan inversión. La “nacionalización” alcanza a más de un millón de hectáreas de tierra.
“Hemos promulgado esta Ley del Congreso para recuperar esas concesiones mineras, donde nunca ha habido inversiones y son concesiones de engorde que no podían recuperarse, concesiones mineras inactivas e improductivas”, ha afirmado Morales en un acto en el palacio presidencial de Quemado.
Un país que ha vivido de su subsuelo
En Bolivia existen 7.000 concesiones mineras, según los datos de la Corporación Minera de Bolivia, de las que 2.474 son totalmente privadas.
El objetivo es “recuperar el 70% de esas inversiones”, que de este modo “volverán al pueblo boliviano”.
La nueva norma que ha sido consensuada con diferentes sectores productivos mineros de Bolivia, está vinculada directamente con la minería de menor porte, y las adjudicaciones revocadas serán redistribuidas entre distintos sectores del país.
La iniciativa “acaba con las disposiciones que favorecían a los concesionarios en la medida que detentan los recursos naturales como parte de su propiedad, ya que el Estado renunciaba a toda reclamación diplomática y se constituían en bienes transferibles y transmisibles de forma hereditaria”, según publica el diario La Razón.
Desde que llegó a la presidencia en 2006, Morales ha llevado a cabo la nacionalización de concesiones petroleras y gasíferas, empresas productoras y transportadoras de hidrocarburos, hidroeléctricas, de telecomunicaciones, aeropuertos y de electricidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario